Uno de los toreros más significativos de la Fuente de San Esteban fue el malogrado Paco Pallarés que siempre llevó el corazón charro en su corta vida acabada por una terrible enfermedad cuando contaba 61 años. Recuerdo que Juan Miguel Núñez, en EFE le dedicó unas palabras emotivas y sinceras al torero salmantino.
Torero de unas extraordinarias cualidades, como lo prueba el interés que tuvo por él Rafael Sánchez ‘Pipo’ -el más importante apoderado de su época, que dirigió sus primeros pasos-, formó pareja con otro nombre destacado de entonces, el linarense José Fuentes.
Pallarés tomó la alternativa, en 1965, en la plaza de la Glorieta salmantina, en una ceremonia en la que actuó de padrino el más importante toreo de esta tierra El Viti. Fue el 14 de septiembre de 1965, una tarde redonda para Pallarés, que desorejó por partida doble a sus dos astados. Pero las grandes esperanzas que despertó Pallarés pronto se diluyeron. Torero que aquilató un concepto fudamentalmente artístico, sin embargo, le faltó continuidad.
Una lesión lo retiró de los ruedos en 1973, y desde entonces fue apoderado de toreros. Sin figurar su nombre en el llamado ‘cartel de oro’ del toreo salmantino, donde están El Viti, Niño de la Capea y Julio Robles, Paco Pallarés ha sido muy querido en su tierra por sus virtudes humanas.
De hecho en la Fuente de San Esteban le erigieron una estatua de bronce en la Plaza del Mercado.
Y hoy al pasar por allí para acceder a Traguntía y pararme en esa remodelada plaza ya no está la estatua del torero, trasladada a otro sitio en las afueras, como rechazado y olvidado de sus propios paisanos, tal vez por el prurito que impera hoy de maldecir de los héroes toreros por ese sentido buenista e hipócrita que está calando en la sociedad y más en políticos ayunos de tradición e ingratos con la memoria de su pueblo.
Creo, en mi humilde opinión, que la figura de Paco Pallarés dio sentido y significado a la Fuente de San Esteban en la Tauromaquia de su época y que su pedestal debería estar en el sitio en donde se concibió con toda la dignidad y reconocimiento de sus paisanos, nobles y agradecidos.
Para él y su recuerdo yo le envío desde Valladolid este clavel reventón.
Foto: Zarza
GARCIA LA FUENTE dice
gracias por difundir mi comentario
GARCIA LA FUENTE dice
guardo un grato recuerdo de mi pisano pallares de sus padres y de su hermano pedro yo entrenaba muchas veces con el invitaba a los tentaderos por campo cerrado