Llegó la sentencia del Tribunal de Justicia en Gijón (Tribunal administrativo central de recursos contractuales) para la pretensión cabezona, inútil, vengativa, falsaria y carente de sentido social y político de una concejal del Ayuntamiento gijonés para impedir la celebración de toros y espectáculos taurinos en la Plaza del Bibio durante la próxima Feria de Begoña. La desestimación del recurso presentado por una de las ediles ha sido acordado y así se ha hecho público, dejando sin efecto la suspensión automática de procedimiento prevista en el artículo 45 del TRLCSP y declara que «no se aprecia la concurrencia de mala fe o temeridad» en la interposición del mismo.
Carlos Zúñiga y su empresa Circuitos taurinos organizará, por tanto, la feria del presente año, tal y como venía haciéndolo en las temporadas pasadas. Incluso él mismo ha dejado dicho que en este aspecto «una vez más vence el toreo, la cultura y el sentido común».
Ciertos partidos que tienen a los toros en el punto de mira para prohibirlos y terminar con ellos para siempre, pese a la oposición frontal de muchos aficionados españoles, al encontrarse ahora en gobiernos locales o influyendo en los regionales no hacen más que combatir la sagrada tradición del pueblo español que tiene a la Tauromaquia como una de las señas de identidad de su existencia. Sin embargo, los taurinos se han dado cuenta que en esta guerra no basta con mantenerse callado, en silencio y aguantar los improperios, acciones e insultos y manifestaciones contrarias a la Fiesta de toros, sino que hay que combatir clara y abiertamente en esta lucha declarada.
Personalmente nos alegra que Gijón y el Bibio, una plaza señorial del Norte de España que tiene una feria encumbrada por un vallisoletano, Carlos Zúñiga, siga adelante en su tarea de expansión y grandeza por la Fiesta taurina. Y seguramente este año vuelva a tener en su graderío histórico la acogida, la admiración y la emoción por ver una vez más a un diestro torero sometiendo la bravura de un toro de lidia.
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