Ya están tres de las ferias importantes en la Comunidad, a la que se añaden los festejos de León y Segovia, a punto de hacerse realidad para disfrute de la afición. Zamora abre el sábado 27 su periplo torero, al igual que Burgos, para festejar a los apóstoles San Pedro y San Pablo. Y entre las capitales de provincia surge la sorpresa en una localidad abulense de conocido prestigio. Arévalo, en la Moraña abulense, que pone en valor un cartel de toros atrayente y singular, apostando por la corrida mixta, en honra a San Victorino mártir, su patrón.
Los dos rejoneadores más importantes en el escalafón, Mendoza y Ventura, abren cartel a los primeros espadas del momento, al menos en cuanto a contrato y categoría contrastada, como son el Juli, Perera y Talavante.
El esfuerzo profesional de las empresas que están intentando ofrecer un espectáculo redondo al público espectador es más que loable. Su trabajo cuesta acartelar esas figuras, bien es verdad que muchos aficionados luego las ven como figuritas de papel si el resultado en la lidia no es bueno. Cuesta tiempo y dinero, bastante dinero, más del que muchos creen, lograr que se dé en un pueblecito como Arévalo dicha combinación en los carteles.
Aquí hay que destacar al impulsor y artífice de esta oferta que no es otro que el arevalense Martín Perrino, un empresario taurino dedicado al menester de dar en su pueblo los toros por San Victorino, habiendo conseguido además dotar a la localidad, con la inestimable ayuda muncipal, de un coso taurino cómodo, acogedor, operativo y moderno.
En cuanto a las de Zamora y Burgos, es Carlos Zúñiga a través de su empresa «Circuitos taurinos» el responsable de ofrecer un cartel completo, importante y especial en donde la relación calidad precio está estudiada profundamente para que los espectadores disfruten de la fiesta de toros.
Por su parte, y a modo de coletilla, añadir aquí que Tauroemoción en Segovia, empresa responsable del festejo anunciado y a celebrar en la ciudad del acueducto, ha presentado denuncia contra los antitaurinos por los actos vandálicos hacia los reclamos, cartelería y murales que la empresa ha colocado por la ciudad. Como se ve la locura intransigente de unos pocos que hacen mucho ruido y causan estragos a la sociedad empresarial taurina sigue campando por sus respetos, sin que hasta la fecha la autoridad ponga freno definitivo a estos despropósitos.
En fin, Zamora, Burgos, Arévalo… tres plazas que conviene conocer, visitar y ver allí obligadamente sus corridas de toros.
Deja una respuesta