Una entretenida tarde de toros en la acogedora Villa pinariega vallisoletana en tarde espléndida la vivida hoy para cerrar la Feria de 2016. Algo más de media entrada en los tendidos y un resultado bonancible para los intervinientes en esta mixta, última del abono. Manuel Manzanares, a caballo, silencio y oreja; El Cordobés, oreja y oreja y David Fandila «El Fandi», oreja y dos orejas, tras lidiar a pie una noble corrida de Torrealba propiedad de Alberto y Javier Revesado, aunque algo escasa de fuerza. Los dos novillos toros de rejones fueron del hierro de Lupi, el primero soso y el segundo con algo más de movilidad. Ambos salieron noblotes y con trote cochinero. Actuó de sobresaliente Álvaro de la Calle.
Siempre hemos dicho que las corridas mixtas deberían tener otra conformación, dejando al rejoneador que lidiara el último de la terna, por aquello de preservar el piso y eliminar las pisadas de las cabalgaduras que dejan el ruedo hecho un patatal para luego tener que torear a pie. Ya sabemos que el caballero rejoneador, por aquello de la cabalgadura y de la antigua nobleza eran quien debía ir por delante en todo festejo y ser tratados en los carteles con el «Don» ante su nombre. Pues igual que el tratamiento se ha perdido en las imprentas, aquí habría que pensar también en favorecer el toreo a pie para que al menos no estuviera el piso lleno de toperas y agujeros.
Menos mal que en Íscar la diligencia de los operarios para alisar el ruedo con un vehículo al que enganchan un rastrillo metálico, tras cada toro rejoneado, fue más que aceptable y aunque la corrida llegó a cerca de las tres horas de reloj, no se aburrió demasiado el personal y menos habiendo merienda por el medio.
Manuel Manzanares en su primero al que castigó con un solo rejón y colocó banderillas a una mano estuvo muy bien y templado en un quiebro, toreando a la grupa y clavando al estribo cuando la res lo permitía. Pinchó y colocó el rejón de muerte entero, tirándose a descabellar tras recibir un aviso. Frío y falto de emoción en las evoluciones propias con las cabalgaduras, anduvo algo más asentado en el cuarto de la tarde al que pasaportó de un rejón entero, algo trasero y contrario pero que tiró por tierra al ejemplar de Lupi. El caballero rejoneador paseó una oreja y recibió un ramo de flores de las reinas de las fiestas ataviadas con el traje típico castellano que, con el calor que hacía, entre subidas y bajadas desde el palco, sudaron las chicas la gota gorda, paliada con una sonrisa y su simpatía.
Manolo Díaz «El Cordobés» es un torero que sabe lo que es el populismo taurino. Se dirige con vehemencia al tendido de la solanera y allí instrumenta su faena con las acrobacias y saltos de rana que además le pidió a voz en grito uno del público cuando estaba toreando por la derecha con temple y cierto mando, con lo que el calor humano, los vítores y los aplausos restallan en la tarde. La sonrisa de Manolo Díaz «El Cordobés» no se quita de sus labios y, mirando al tendido, ofrece al personal lo que demanda. Tanto es así que pinchó dos veces sin soltar y logró una estocada trasera, concediéndosele la oreja pedida por el público bullanguero.
El Cordobés es alegría y vitalidad para la fiesta. No defrauda a nadie y expone un toreo casi tremendista pero que no tiene trascendencia alguna. Y en fin, como hay gente «pa tó» que diría el Gallo, la oreja en cada uno de sus enemigos cayó en el esportón del torero de Arganda.
Así que David Fandila «El Fandi» no le fue a la zaga cuando recibió en el tercio, de rodillas, con una larga y remató luego en el centro del platillo poniéndose de hinojos de nuevo. Puso tres pares de banderillas a cada toro, el tercero al violín con cierto riesgo al tirarle el animal una tarascada que le golpeó ligeramente, probablemente con uno de los palitroques. Perfilado para matar, el animal sin cuadrar se puso en movimiento y el torero le recetó una estocada caída y tendida prácticamente al encuentro.
Donde estuvo mejor Fandi fue en el que cerraba corrida y feria, al que tocaron la jota de Íscar de salida los músicos de la formidable y armónica banda de música iscariense, un castaño que tras la varita de rigor se dio un topetazo contra las tablas de la barrera, cayendo de culo y quedando algo resentido, al retirar el capote El Cordobés que estaba en su sitio y el toro ir hacia él.
Fandi empezó su faena de rodillas y trató de meter en el canasto al noble ejemplar de los Hermanos Revesado. Pases con estética no muy adorable e intermitente en una faena donde puso las ganas el torero granadino. Perfilado para matar, le recetó una entera trasera que lo mandó al desolladero y las dos orejas le fueron concedidas por el usía. Otro que tal baila, sin chaqueta ni corbata, presidiendo la corrida como si estuviera de veraneo, sin entender que esto es una liturgia de forma y fondo. Ya decía Cervantes que un palo vestido no parece palo y la Presidencia de una corrida debe estar siempre dignificada, no solo en el fondo, sino al menos en las formas.
Y se acabó Íscar una feria, un año más, y un intento para lograr la vuelta a la plaza de los espectadores que han ido abandonando paulatinamente, año a año, la tendencia a asistir a los toros de su pueblo. Y eso que en la Villa pinariega hay grandes y buenos aficionados, pero las cosas son como son.
Fotografías: José FERMÍN Rodríguez
francisco dice
Que personaje este tio creo q debera de tener mucha edad. Por suerte los tiempos cambian y la gente se moderniza incluso en un palco. Da gusto ver a un palco joven y desinteresado y no una presidencia de carcamales, eso si se. Garañeda con su corbata y chaqueta. Dejad paso a los jóvenes que quieren y miran por el bien de la fiesta. Vosotros lo único que miráis es ir gratis a los toros y si os invitan a cenar mucho mejor. Hay que saber cuando retirarse. Seguro que no publicareis este mensaje porque eres un cobarde y no aceptas que la gente este en contra tuya. Pero creo que es hora que dejes paso a los jóvenes. Si periodistas jóvenes y si presidentes jóvenes y modernos. Deja las corbatas para las bodas uno puede ser elegante sin corbata como ha ido el chaval de la presidencia toda la feria. Resumiendo releve regeracional ya……dediquese a otra cosa. Esto le queda grande
Jesus López dice
No insistas, amigo, enviando diversos mensajes con la misma IP que se nota mucho. Quien se mete a torear o Presidir una corrida debe conocer lo primero el reglamento , aplicarlo y estar como se debe. Lo demás seas joven o viejo, es igual. Te llames Chema, Antonio, Félix, Marcos,Felipe o Francisco. Y gracias por leer mi crónica con el interés pasional con que la has leído. Los insultos sobran.Saludos.