El discurso institucional del Presidente Alfonso Fernández Mañueco con motivo del Día de la Comunidad de Castilla y León, servido diligentemente por los enlaces de la Institución regional ha sido claro, diáfano, con sentido y esperanzador. Tras haber reconocido y agradecido a los profesionales sanitarios, a las personas que garantizan el abastecimiento alimentario y de primera necesidad, desde los agricultores y ganaderos a los comercios, a los empleados públicos que están haciendo un esfuerzo para que todo funcione, a los periodistas y medios de comunicación y a todos los trabajadores, que se exponen con valentía por los demás, el Presidente ha dicho que todos cuantos vivimos en esta Comunidad podemos sentirnos orgullosos por haber sabido luchar contra los problemas.
Ciertamente, La Comunidad autónoma está dando muestras de diligencia, sentido del trabajo y capacidad dentro de sus posibilidades para paliar la grave pandemia que ha dejado ya en España una cifra que sobrepasa los 30.000 muertos. Familias que han visto romper el engarce con sus padres, abuelos, parientes y amigos con la descarnada guadaña de la muerte y llevando a la eternidad a tantos y tantos seres humanos de nuestra tierra y de España entera, sin que haya ni un crespón en la bandera de la nación, la de todos. Pero nuestra Comunidad en la decisión que le atañe al menos recuerda a todos los muertos con el luto evidente en sus enseñas.
El talante mostrado por Fernández Mañueco como presidente autonómico ha asegurado que la Junta de Castilla y León afronta este grave momento con entrega, trabajando sin descanso e integrando los esfuerzos de los agentes públicos y privados, haciéndolo, además, con lealtad hacia el Gobierno de España, con proporcionalidad en las medidas y con plena transparencia.
Desde la humildad, ha pedido perdón si alguna decisión no fue del todo acertada, pero ha insistido en que el Gobierno de Castilla y León siempre ha puesto toda su voluntad y todo su empeño en hacer lo más conveniente para proteger a los castellanos y leoneses.
Nuestro portal se dedica a comentar, escribir, apoyar e informar de las vicisitudes que atañen al mundo taurino; sin embargo hoy toda la redacción cambia el viraje de sus reacciones, noticias, reseñas, comentarios para otorgar a un hombre como Alfonso Fernández Mañueco, máximo dirigente de la política de esta tierra de Castilla y León, el apoyo, la colaboración y la lealtad que se precisa para salir de este tremendo y mortal atolladero a consecuencia de una peste venida de China cuando alboreaba este año 2020.
«Hay mucho trabajo por delante para frenar la pandemia, reactivar pronto la economía y evitar heridas profundas que provoquen cicatrices sociales. Los empresarios, autónomos y trabajadores contarán con el apoyo de Castilla y León«.
Nuestra tierra y sus gentes merecen en este día el abrazo generoso y emocional que ayude a paliar tantas lágrimas, lloros y sinsabores como estamos padeciendo.
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