El primer fin de semana de agosto es el elegido en el calendario para celebrar las fiestas patronales de la localidad piñonera en la provincia de Valladolid que cuenta con una raigambre y sentido superior a la media en la puesta en marcha de festejos taurinos ofrecidos en el escaparate de la llamada a los aficionados y público en general.
En esta ocasión los días 5, 6 y 7 de agosto están señalados en el calendario, no solo de la provincia vallisoletana sino en las del resto de la Comunidad para ir a Íscar a gustar de una feria taurina en donde no faltan los encierros, probadillas, capeas y toros corridos por las calles que atraen como un imán a las limaduras de hierro.
El Ayuntamiento iscariense ha puesto en manos de Pepe Amilburu la realización de esta feria 2017. Las combinaciones de cartelería son atrayentes de todo punto con la posibilidad de ver una corrida de toros extraordinaria, digna de Madrid, el domingo día 6 en la que los diestros Curro Díaz, Paco Ureña y Fortes lidiarán un encierro de los Hermanos Domínguez Camacho. Y la corrida extraordinaria del día de la fiesta, 7 de agosto, será en la modalidad de rejones con un encierro de Dias Cutinho para los caballeros Ruiz Fernandes, Andy Cartagena y Pérez Langa.
Esta vez en el arranque festivo del sábado han programado un festejo mixto con el toreo popular de cortes denominado «Campeón de campeones» y la lidia ordinaria a pie a cargo del novillero local Darío Domínguez que se las verá con los ejemplares de Agustínez.
Este espectáculo será el sábado 5 y servirá de arranque de una feria que merece la atención del espectador sin duda alguna, porque concita una actividad casi nunca vista hasta la fecha con la mezcla de las modalidades de Tauromaquia que se dan en estos momentos: Por un lado, el toreo popular, a cuerpo limpio, de los cortes y por otro, el toreo a pie, el de luces, el llamado profesional.
Buenas jornadas las de Íscar en esta ocasión en la que dos corridas de toros celebran el estío con toda la espectacularidad que la fiesta tiene para la Villa pinariega. Íscar, por tanto, un año más abre sus puertas hospitalarias a visitantes y forasteros para disfrutar con sus gentes de unas fiestas de verano gustosas, agradables y llenas de vivencia y singularidad.
Fotografías: FERMÍN Rodríguez
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