El rejoneador extremeño Leonardo Hernández ha salido por la puerta grande de la Plaza de Tordesillas tras la corrida celebrada el martes de la peña. Sus compañeros de cartel Oscar Borjas y Mario Pérez Langa cortaron una oreja cada uno de ellos. Tarde soleada de excelente temperatura y algo más de media entrada en el coso de Valdehuertos. Se han lidiado seis toros de los Bayones, con cuajo y romana, hondos, con presencia, de juego dispar.
El oficio como caballero rejoneador de Leonardo Hernández quedó patente en sus dos intervenciones. Serio, clásico, dominador y colocando arriba banderillas tanto largas como cortas, fueron aplaudidas por el público, especialmente al emplazarse sus dos enemigos y no embestir con más raza e ímpetu a las cabalgaduras.
El burgalés Óscar Borjas que abrió plaza por ser el más antiguo en el escalafón actuó muy bien en todos los tercios, excepto en el de muerte y ante el cuarto de la tarde Borjas demostró la raza, la espectacularidad y el doblarse como un junco en unas cabriolas muy aplaudidas por el público. Mostró siempre entusiasmo y ganas de agradar al respetable que le reconoció su esfuerzo pidiendo la oreja del cuarto de la tarde.
Mario Pérez Langa, un rejoneador con proyección notable dio una vuelta al ruedo tras despachar al primero de su lote y ante el sexto, el toro más boyante del encierro de los Bayones, de impresionante trapío, logró cortarle la oreja.
Buena tarde de toros en Tordesillas en la que, al final, Leonardo Hernández se llevó el gato al agua, triunfando merecidamente.
Foto: Archivo/José FERMIN Rodríguez
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