El pleno de la Corporación Municipal de la localidad zamorana de Toro ha acordado, con la abstención del PSOE, declarar los festejos taurinos y las fiestas de San Agustín parte integrante del patrimonio la ciudad, de acuerdo a lo establecido en la convención para la salvaguardia del patrimonio cultural inmaterial de la Organización de las Naciones Unidas (Unesco). El concejal José Luis Prieto fue el encargado de defender la iniciativa basada en que la tauromaquia encaja perfectamente en lo que establece la Unesco y que los festejos taurinos son una representación artística y un arte del que se nutren el resto de las bellas artes. Esta propuesta ha sido planteada «desde el convencimiento de que la defensa y salvaguardia de lo nuestro es una obligación para con nuestros mayores y un legado que dejaremos a nuestros hijos». Además resaltó que el cuidado del patrimonio, «contribuirá a enriquecer y defender la diversidad cultural, frente a los fenómenos de intolerancia que los procesos de globalización pueden ocasionar y que, en el caso de los festejos taurinos, ha quedado tan patente». Está documentado que la tradición taurina de Toro tiene una antigüedad que supera los 500 años y que se celebraban espectáculos taurinos en distintas festividades como San Pedro, Santiago o El Pilar aunque, como subrayó, las fiestas de San Agustín son las que concentran un mayor número de festejos. Con la declaración de los festejos taurinos como parte integrante del patrimonio de la ciudad se tendrán catalogados y reconocidos el lugar de celebración, la plaza de toros, así como la expresión cultural y el espacio temporal en el que se desarrollan las fiestas de San Agustín.
La ciudad de Toro se ha constituido así en ser la primera localidad de España que acuerda dicha declaración, decisión admirable y admirada por todos los taurinos que reconocen el esfuerzo de los miembros de la Corporación municipal que han hecho un banderín de enganche, votando a favor de la propuesta, sin miramientos, sin remilgos y sin miedos, creyendo en lo suyo y en cuanto afecta a nuestras tradiciones.
Como colofón de esta reconocida decisión, en el Hotel María de Molina se han entregado los premios de la pasada feria al diestro Fernando Robleño por su completa faena a un toro de Adolfo Martín y a Leandro por el detalle denominado sentimiento torero en la corrida de inauguración de la plaza el pasado mes de julio ante un toro de Jandilla, el único que mató, pues resultó cogido de cierta gravedad por el segundo de su lote de la misma ganadería. También asistió el Secretario de la mesa del toro y ganadero Juan José Rueda quien expuso al auditorio las actividades de dicha organización. Miembros de la Corporación municipal con su alcalde Jesús Sedano a la cabeza asistieron al acto.Tanto Feliciano como Manuel, propietarios del establecimiento hotelero, acogieron y dieron las gracias por su presencia a cuantos aficionados se dieron cita en una tarde noche lluviosa que prolongó sus horas nocturnas hablando de toros.
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