Cuatro toros, lidiados esta tarde como cierre de la Feria de Arévalo en la novillada programada se han ido al desolladero con las orejas puestas sin que la terna actuante entrara en el acople decisivo con esos utreros de la ganadería sevillana de «Toros de la Plata». El que abrió plaza de nombre «bilbainoso» se rajó a la mitad de la faena buscando las tablas y el 3º de nombre «insumiso» retiró del festejo al novillero Clemente Jaume al pisotearle feamente y dañarle un par de costillas y el hígado posiblemente por lo que fue traslado en ambulancia al hospital de Ávila, tras resbalarse cuando intentaba igualar a la res para perfilarse con el estoque y ser atropellado y buscado con saña en el suelo por el burel.
La novillada con picadores de esta tarde ha servido también para despedir al subalterno arevalense Alberto Hernández que tantos años ha estado en la dirección de la lidia de los festejos taurinos y que hoy era el día de su retirada de los ruedos. Clemente Jaume tuvo para él un recuerdo muy emotivo al brindarle el toro que le causaría la lesión al buen novillero francés que dirige el matador burgalés José Ignacio Ramos.
Tan solo un tercio de plaza se dio cita en el cierre de la feria taurina de Arévalo, digna y confeccionada por el equipo de Chencho, José Antonio, Rebeca, Pelayo, Juan Luis, Cali y sus colaboradores que ha concitado la atención de los medios al volver la mirada a la capital de la Moraña en una tarde espléndida de luz y sol. Antes de romper el paseíllo sonó el Himno nacional de España.
Y vamos con el relato de lo sucedido esta tarde cuyo reportaje gráfico es de José FERMÍN Rodríguez, el retratista medinense cordial y bueno que me ha acompañado para cubrir la Feria de Arévalo.
Se han lidiado seis ejemplares utreros de la ganadería Toros de la Plata que de haber caído en manos más expertas estaríamos hablando de un resultado triunfal sin duda ninguna. Pero hoy los novilleros han estado muy por debajo de lo que de ellos se espera.
Ángel Bustos, el torero de Badajoz afincado en Madrid, con perfil craneal abelmontado no puso brillantez ante su primero, ni logró someterlo ni hacerlo humillar, ni por supuesto conseguir el éxito buscado. Y eso que brindó al respetable la muerte del torete un «bilbanoso» que se rajó a mitad de faena. Un sainete con la espada donde hubo de todo, metisaca, pinchazos defectuosos, media por lo que sonó el aviso del Palco. Silencio fue el bagaje obtenido por el pacense.
Ante el 4º de la tarde, un «alterado» que protestó en la vara queriendo quitarse el palo estuvo lo mejor del novillero, Y eso que la cuadrilla le cuidó y mimó la embestida sobre todo a cargo del banderillero Sierra que lidió muy bien. Su faena amenizada por la música no estuvo rubricada con los aceros, pinchando dos veces al ejemplar. Unos aplausos de ánimo y a otra cosa, mariposa.
Darío Domínguez, el novillero de Íscar al que anuncian para tomar la alternativa en la localidad piñonera no estuvo a la altura de las circunstancias, tal vez por la falta de oficio y decisión. Bien es verdad que toreó un par de series por el pitón izquierdo bastante entonadas y aplaudidas. Cuando los pasajes estaban más asentados y con cierta gracia recibió un achuchón sin consecuencias. Eso le despertó y le encorajinó al novillero iscariense terminando su faena con un desplante de rodillas delante del toro. Pero la espada no es su fuerte, pinchando varias veces y recibiendo el silencio del respetable. Ante el 5º un ejemplar de nombre «aljarafe» que brindó a un espectador puso voluntad para completar una faena sin demasiado ritmo ni cadencia, aunque estuvo mejor esta vez con la mano derecha.
Clemente Jaume el francés de Beziers hizo hasta ser cogido lo mejorcito de la tarde. Lo recibió de capote con un saludo digno acabando con una buena media. El subalterno Rubén de León fue aplaudido tras colocar sus rehiletes. El francés empezó su faena en el centro del platillo llamando al toro que acudió con galope y celo a la llamada propinándole el novillero dos pases cambiados muy aplaudidos. Luego la faena, cimentada, por el pitón izquierdo estuvo construida con majeza y decisión. Sin embargo, buscando la igualada resbaló el muchacho recibiendo un golpetazo en el suelo por el que tuvo que ser atendido por las asistencias sanitarias. Tras matar al burel de media y estocada pasó a la enfermería siendo trasladado, tras su revisión médica, al hospital de Ávila. Recibió una gran ovación de los espectadores.
En fin. Una novillada de Arévalo que se quedó a medio torear por la bisoñez de los participantes y se fue al desolladero con las orejas puestas.
Que San Victorino bendiga a la gente de la Moraña cuyas atenciones hacia nosotros han estado en su línea de acogida y hospitalidad. ¡Hasta otro año!
FOTOS: FERMÍN Rodríguez.
FICHA DE LA NOVILLADA.
ARÉVALO. 4 de julio. Un tercio de plaza. Homenajearon al subalterno Alberto Hernández «botijo» por su retirada de los ruedos.
Han sido lidiados novillos de «Toros de la plata», duros y encastados. El primero manso. Aplaudidos en el arrastre 2º,3º, 4º y 6º.
Ángel Bustos, silencio, silencio y aplausos.
Darío Domínguez, silencio y silencio.
Clemente Jaume, fuerte ovación en el único que mató.
TURRONERO dice
No se quien el crítico, pero parece q no estuvo ni a verla… novillada buena???
Rajados,brutos,desrazados,sin clase ninguna… el único q se dejó algo,el sexto. Un saludo 👋
Juan jose dice
turronero,.Usted si que NO ESTUVO ni por asomo salvo que le obceque el interés por alguien o algo. La novillada tuvo cuatro atanasios que sirvieron perfectamente y en manos más expertas hubieran sido de triunfo total pero los novilleros estaban VERDES como ovas, salvo el francés, y demasiado poco critica el autor de la crónica de la federacion para mí muy atinada.